PESCA SUBMARINA EN PERU
Hoy día me metí al mar a bucear…
He querido comenzar así este pequeño artículo pues es así como viendo lo que veo hoy me hace recordar lo que era el fondo de nuestras playas hace tan solo diez años, antes del traqueo, la explosión de redes, la construcción, el aumento de casas y, por ende, la densidad demográfica… y como dejar de mencionar los desagües de nuestro balneario, piscinas y pozos sépticos instalados a lo largo de todas nuestras pequeñas bahías. etc, etc.
Estoy hablando de Punta Hermosa; me mudé a vivir aquí hace exactamente 18 años, cansado de la ciudad y cada vez más convencido de la vida al lado del mar, el auto-abastecimiento y la mínima dependencia del mercado masivo de consumo, me mudé a vivir cerca y al mismo tiempo libre de la polución de la ciudad.
Soy buzo, pescador submarino y amante del mar, mis hijos han crecido unos y nacido otros aquí, en Punta Hermosa; Joaquín el menor de 13 años creció comiendo pescado buceado por mi; hoy en día luego de 10 años nuestros fondos “inmediatos” por llamarlos de alguna forma están “vacíos”, parecen un desierto, no hay vida, solo erizos negros, los últimos habitantes, los que siempre quedan al final para apagar la luz e irse….sí, es una triste verdad. Pasaré rápidamente a detallar cómo y porqué se ha producido este desastre que para la gran mayoría pasa desapercibido:
1.- Aumento de gente que viene a vivir al balneario = aumento de flujo de desagües en las tuberías que drenan nuestra inmundicia al mar, uno frente a la Isla de Punta Hermosa y el otro en la punta de playa Norte, ambas son tuberías que drenan PERMANENTEMENTE sus aguas al mar, directamente a las playas.
2.- Construcción de muchísimas casas en Caballeros y Señoritas sin cumplir con lo que ofreció esa urbanización, la construcción de una red de desagües que bombearían los deshechos a una poza de tratamiento de aguas servidas; nunca lo hicieron, construyen silos, enormes pozos sépticos en la pistita de tierra que circula frente a la estrechísima franja de arena y piedras. Estas bahías, ya colapsaron y colapsan casi a diario, los camiones vienen y drenan el contenido de estos pozos, pero enormes “aureolas” de fétido olor nos hacen ver como estos silos drenan su contenido a las arenas, rocas y por supuesto al mar.
3.- Todos los dueños de propiedades en las “riberas” de estas playas tienen hermosas piscinas, no han encontrado nada mejor que instalar tuberías de PVC muy decorativas que drenan el contenido de sus piscinas con el correspondiente contenido de acido muriático y cloro necesario para las piscinas pero no para los pequeños hábitats que constituyen las rocas y arenas de nuestras playas, ya no hay estrellas de mar, ni yuyos ni cangrejitos, ahora hay olores abombados, rocas blanqueadas y ratas, sí, olvidaba mencionarlas; los enrocados que protegen los silos y las viviendas de primera fila de las crecidas del mar están repletos de ratas hoy en día.
4.- Todos los nuevos habitantes llegan con un furor playero, todos quieren comer pescado fresco, la gente de escasos recursos, la mayoría pescadores que se transforman en guardianes, se ofrecen gentilmente a hacerles unas redes, ponerlas diariamente y así cosechar el divino “pescado fresco”. ¿Cuál es el resultado? una profusión de redes de todos los colores, estilos y tamaños que impiden, alejan y por ultimo capturan a cualquier pez, molusco o crustáceo sin discriminación alguna, peces, cangrejos, pulpos, langostas y cuanto ser vivo se aventura a cruzar por estas zonas.
5.- La pesca excesiva por parte de los buzos “rasca playas”; el rasca playas es un pescador característico de nuestras playas que entra provisto de una bolsa de malla, gancho y arpón, dispuesto a sacar lo que encuentre y que le reporte algún dinero diario, estos han aumentado en número y en desvergüenza para acabar sin medida ni control con todos los seres vivos de las orillas de no más de cuatro metros de profundidad, pulpitos bebes (tan codiciado plato gourmet hoy en día…), lenguaditos, lengüetas le llaman ahora en los supermercados!!!, tramboyitos, pejesapos, caracoles, etc., la lista es larga y triste.
6.- El traqueo, este es un método de pesca insano y estúpido, diseñado por los pescadores de aquí, y San Bartolo, balnearios del sur… Entran 4 o 5 embarcaciones pequeñas a remo y tienden redes (trasmallos) rodeando cada una de las puntas de nuestras playas. La Timba es la que está entre Pulpos y El Silencio, Caballeros, entre El Silencio y Caballeros, Señoritas entre Caballeros y Señoritas y así sucesivamente, El Paso, Playa Norte, etc.,comienza a jalar y cerrar el cerco hacia la playa, pero como hay olas y muchas rocas , peñas y arrecifes, las “bandas” de buzos entran a destrabar los trasmallos (son 3 paños de redes paralelas cada uno con el coco o agujero mas estrecho) entonces luego de una larga y paciente faena estos “señores” terminan de sacar su red de arrastre por uno de los lados de la punta con TODO lo que se movía adentro, al principio fueron entre 3 y 4 toneladas de pescado cada vez!!!! La chita era su victima principal; hoy en día no hay mas Chitas pescables, y luego de una guerra solo contra ellos ahora ellos vienen y me dicen “Oiga señor Marco y porque no lo prohíben pes si nosotros ya solo estamos esperando que lo prohíban pes, ya no hay nada….”
Ya acabaron con las chitas.
7.- La falta de control al ingreso de embarcaciones de otros lugares a sobrepescar y extraer con compresora todos los recursos que estas playas ofrecían.
8.- Las motos de agua, botes, bananas, y toda suerte de contaminación sonora que en el mar se propaga mucho más fuerte.
9.- La pesca con dinamita, aunque parezca increíble aun hoy se sigue pescando con dinamita, en la Isla de Pachacamac, reserva de toda esta población de seres vivos de este ecosistema del sur se sigue pescando con dinamita.
10.- Por último, el inicio de las descargas del colector de rebose de San Bartolo en el Río Lurín, esta fue la gota final, ahora nuestras aguas en cada entrada de corriente norte se ven bañadas de los desagües de San Bartolo que no son tratados aún por su planta de tratamiento mas los de Lurín y aledaños.
Así, pues, si antes en la parte norte de la Punta del Silencio uno podía cosechar una docena de langostas y dejar vivir a las más pequeñas, o unos hermosos lenguados de hasta 12 Kilos!!! en el medio de Caballeros o en la Punta de Playa norte, o pulpos en todas las playas,
Loros en el Paso y chitas en todas las puntas, chitas de 4 a 5 Kilos!!!
Hoy no hay NADA, con suerte veo poblaciones de chitas de 150 gramos, loritos y pintadillas de colores que diariamente siguen “adornando” la cintura de muchos “rascaplayas”.
Las autoridades no controlan NADA, es el único país que no restringe de ninguna forma la pesca artesanal o deportiva, aquí todo el mundo pesca como quiere, lo que quiere. La construcción va “viento en popa”; las autoridades siembran de concreto nuestras calles y yo me pregunto: ¿no se dan cuenta por qué los primeros habitantes de este balneario vinieron y hoy en día siguen viniendo a vivir a estas playas? Por su mar, la riqueza de su mar y la belleza de sus playas, ¿y qué estamos haciendo? Destruyéndolas y contaminándolas al máximo.
Yo hice denuncias a muchos programas de televisión, al Imarpe, a Dicapi, por ultimo a la Municipalidad y la Comisaría y no obtuve respuesta. Ojalá este artículo nos mueva a tener conciencia que esto que esta prácticamente CONSUMADO aquí esta pasando en TODAS y cada una de las playas de nuestro país, cuidemos el mar, nuestras costas y por debajo de nuestras costas. Se trata de una fuente inmensa de cultura, identificación con la naturaleza y el mundo en que vivimos, TODOS deberíamos saber nadar y bucear, es vida y por último alimento y diversión para todos si lo utilizamos con el debido respeto.
Hay formas de controlar y educar el uso de los recursos, si se trata de desagües pues tratemos las aguas servidas, las reutilizaremos para el riego y hasta para la acuicultura; la sobre pesca, teniendo un control de las embarcaciones, licencias, tallas y pesos de las especies así como modalidades de pesca.Eduquémonos, creo que es necesario enseñar a los niños y los adultos a ver el mar como parte de nuestras vidas, somos todos parte de un todo y el mar es más del 75% de ese todo.
